miércoles, 27 de marzo de 2013

Brilla

El delicado flanqueo, la esquiva, el avance. Una defensa impenetrable, tanto como las murallas troyanas no?
Son los deseos de eternidad lo que abarcan el tiempo disperso, sumido en la enormidad de dominar a Cronos. Cantarán los atlantes llantos de dolor sopesando los pilares de nuestro universo.
Baila, Caronte, entre tu laguna con un rumbo invariable. Y es nuestra soledad lo que nos hace pensar en los mitos de forma constante.
Siéntete carmesí en las batallas del ayer, para dejar un sol rojo y una luna neutra a la que nunca aullar. Entristéceme desde los albores del egoísmo y siéntete libre lanzándote desde el abismo. ¿Como suena la caída? ni si quiera duele el cuerpo, cuando ya no sientes el alma

viernes, 15 de marzo de 2013

Un quizas

Despertar... es como mirarte por ultima vez. Un último suspiro, esa última palabra, que siempre termina siendo la menos idónea.
Mirar por una ventana sin ver más allá del cristal.
Cautivar la mirada, tocar al tacto y sentirte embriagada entre la calidez de tus brazos.
Miro al cielo y pienso en cuantos antes lo miraron, si compartimos este mismo techo todos estamos conectados. Respiramos el mismo aire. Quizás uno de mis soplos esté ya por Asia dejándose llevar entre los campos de arroz.

Acaramelado fuego que fundes mis esperanzas, seré Filípides en martón corriendo hasta tu portal, desde el cual me cuelgue en la cornisa llegando así a las vallas que encarcelan tu persiana. Y besarte una última vez tras el metal que nos separa.

jueves, 7 de marzo de 2013

Sin remedio

¿Quien soy? A veces me lo pregunto y me replico a mi misma queriendo resolver la pregunta con otra respuesta. No queda más en la cesta por arrojar y mi saco de regalos esta vacío ante la vida. ¿Que cabe esperar? Solo el destino es conocedor de un más allá, el que sigue después de nuestras punteras y narra un "sucederá" cerrando las fronteras que quiera.
No se haya satisfacción. El día a día es el poseedor de nuestro tiempo y en todo momento siempre hay más de una persona allá fuera asistiendo a un proceso más como puede ser la muerte.
Las estrellas serán ahora mis espectadores más brillantes, y sentir envidia de la luna por estar rodeada de diamantes. Un lago cósmico que evito en, la poca visibilidad de la ciudad donde habito y ya está... Esta es la 5ª sinfonía de un "Quizás" a esos tantos expectantes que esperan algo del más allá.
Estamos solos meciendo nuestros sueños en una hamaca que está apunto de desquebrajar.
¿Disfrutar? La felicidad es efímera si solo se sonríe un momento y se tornan rápido a las caras lívidas, sin vida. Sin limites y todo en desmedida. Ya no hay proporción ni razón en nada de lo que diga. Siento divagar...
Arrojando fuerte, lejos, alto a todo aquello longevo para que venga ami el amargo sabor de lo efímero.
Triste es ver como un ángel se despeña coger una pluma y guardártela como recompensa. Escribo cosas superfluas.
¿Existe la realidad? Esta allí fuera, cógela con las manos pero nunca se entenderá. Solo vemos lo que creemos, lo demás es un enigma.


Solo leo. Trato de ocultarme entre una hoja que camufle la herida y para crear otra que solo deje manar imaginación.
¿Es todo esto autocompasión? Me siento penosa por ello. Y sigo sumergiéndome entre el azar imaginativo de un escritor. Y sigo pensando si yo llegaré a absorber así a la gente con lo que narre. No importa. De nada sirve dejar escapar un lamento si el lamento no se refrena nunca. No es un vaso de agua, por mas que vierta lágrimas no me voy a vaciar. De todas formas no puedo llorar, parece algo fugaz en mis capacidades.